jueves, 2 de agosto de 2018

Denuncia CNI-CIG Chiapas


Denuncia CNI-CIG Chiapas

28 jul 2018

Asamblea estatal del Concejo Indígena de Gobierno y del Congreso Nacional Indígena de Chiapas

A las Redes de Apoyo al CIG
A la Sexta Nacional e Internacional
A los medios libres, autónomos, alternativos, independientes
A la prensa nacional e internacional
Al pueblo de México

Reunidos en Asamblea estatal del Concejo Indígena de Gobierno, presentes 80 delegados y 24 Concejales y Concejalas de las diferentes regiones tsotsil, tseltal, tojolabal, chol, zoque y mestizo de la Costa de Chiapas, reafirmamos nuestra lucha por la vida, como lo ha declarado nuestra vocera del Concejo Indígena de Gobierno, por eso seguiremos trabajando para hacer florecer la organización de nuestros pueblos y nuestro Concejo. Como pueblos que caminamos con el Congreso Nacional Indígena nuestra lucha va más allá del sucio proceso de elecciones que dividen y corrompen la vida de nuestros pueblos y comunidades, que aprovecha la invasión de recursos gubernamentales para controlar, crear conflictos y sembrar la muerte para el despojo de nuestras tierras y territorios, para alimentar la guerra para el despojo que está creciendo en nuestras regiones, y en las diferentes partes de nuestro país.

Por Acuerdo de la Asamblea;

DENUNCIAMOS:

En la región Chol de Salto de Agua, amenazan de desalojo  a la comunidad de San José El Bascán, que habita en tierras recuperadas en 1994. Los que fueron dueños esas tierras Ernesto Astudillo Alvarado, junto con sus hermanos Natividad y Gonzalo Astudillo Alvarado, enviaron el mensaje a la comunidad exigiendo el pago de la tierra. El 30 de marzo vendieron esa propiedad a Artemio Alvaro Vazquez, Diego Arcos Hernández, Rodolfo Alvaro Vazquez, quienes enviaron el mensaje a la comunidad de que el terreno les pertenece y lo desalojen, como  la comunidad no ha hecho caso a las presiones, fueron denunciados ante el ministerio público. La comunidad chol de San José El Bascán, organizada en su región chol de Salto de Agua, no va a dejar las tierras que fueron recuperadas, las va a defender.

En la zona Zoque de Marqués de Comillas, se encuentra bajo la amenaza por la presencia de pozos petroleros y otras actividades extractivas. Han estado llegando personal de gobierno, que se desconoce su procedencia, y que están entrando a las tierras de las comunidades sin conocimiento de nadie. En el mes de abril entraron en el terreno ejidal de Zamora Pico de oro, donde manifestaron que están a la espera de la aprobación para comenzar la explotación de los materiales que se encuentran. Las autoridades de las comunidades desconocen la información sobre esta explotación, pero está la amenaza de comenzarán a entrar las empresas para trabajar en las tierras de Pico de Oro, comunidades céntricas,  así como San José, Río Salinas, América Libre, y también en la Nueva Unión, que pertenece al municipio de Benemérito de las Américas.

En la región Tsotsil-Tseltal, en Venustiano Carranza, familias de pescadores de la comunidad de Paraíso y miembros del CNI, así como sociedad pesquera de esa comunidad, están siendo amenazados por los marinos encargados de la vigilancia de la Presa La angostura, de que serán multados de 15 mil a 20 mil pesos, y que les decomisarán el equipo de pesca, por no querer participar en los partidos políticos y por no querer recibir los regalos que están repartiendo. Serán afectados gravemente al arrebatarles sus herramientas de trabajo como pescadores, privándoles de los medios para obtener su sustento, ya que esta comunidad antes era campesina, pero como fue inundada la tierra por la presa ahí quedaron sus tierras por lo que se dedican a pescar.

En la comunidad de Mitziton, de San Cristóbal de Las Casas, existen amenazas de que les quitarán el permiso y la casa de salud autónoma, que construyeron  hace 3 años, por parte de los priistas de la comunidad. Las exautoridades ejidales y el agente estaban de acuerdo cuando se construyó la clínica, ahora que cambiaron los priistas han presionado las nuevas autoridades para que arrebaten la clínica por organizarse como parte del Congreso Nacional Indígena.

Por lo que les pedimos estar atentos de cualquier represalia en nuestra contra.

ASAMBLEA ESTATAL DEL CONCEJO INDIGENA DE GOBIERNO EN CHIAPAS

CONGRESO NACIONAL INDIGENA

NUNCA MÁS UN MÉXICO SIN NOSOTROS

POR LA RECONSTITUCIÓN INTEGRAL DE NUESTROS PUEBLOS

CHIAPAS, JULIO DE 2018


Con AMLO, nada para las izquierdas - Proceso


Con AMLO, nada para las izquierdas

CIUDAD DE MÉXICO (apro).- Se cumple un mes de la elección y fue suficiente para que las izquierdas, en especial aquellas no alineadas a los partidos políticos, marcaran su distancia, por lo visto definitiva, de Andrés Manuel López Obrador.

La cuestión es simple: López Obrador no es de izquierda, aunque las campañas negras de tres elecciones presidenciales lo hayan expuesto como tal.

No hay engaño. Desde la campaña fue claro: dijo que era tiempo de conciliación y unidad, cuando sus simpatizantes le reclamaban la suma de priistas y panistas; prometió que no daría marcha atrás a la Reforma Energética, aunque planteó revisión de contratos y más inversión gubernamental en el sector; tendió su mano a Enrique Peña Nieto, a Donald Trump y al alto empresariado, a quienes dedicó la espectacularidad de los primeros días después del triunfo.

Al mismo tiempo, se ganó una severa crítica del Ejército Zapatista de Liberación Nacional (EZLN), por los malos oficios del sacerdote Alejandro Solalinde, un exceso de protagonismo que, en caso de contar con enlace como afirmó tenía, acabó descalificado y desmentido por uno de los grupos más emblemáticos de rebeldía contemporánea a escala global.

También te recomendamos

Cuando lo hizo ya había puesto en un primer aprieto a López Obrador al revelar la oferta de presidir la Comisión Nacional de Derechos Humanos, por el hecho de que el organismo es constitucionalmente autónomo, se supone lo elige el Senado y no está en período de renovación sino hasta 2019. Pero en las izquierdas que mantienen vivo el reclamo por la desaparición de los 43 estudiantes de la normal "Raúl Isidro Burgos", la inconformidad vino por la mala imagen del sacerdote, primero en revelar y promover la famosa "verdad histórica" –vulnerable y anómala– que a la postre ofrecería el entonces procurador general, Jesús Murillo Karam.

Solalinde, sin embargo, ha sido avalado por López Obrador cuyo staff confirmó, por ejemplo, la oferta de la CNDH y no desmintió el, por torpe, mal logrado intento de aproximación al EZLN.

Pero no es todo. Los anuncios de nombramientos que ha hecho el ganador de los comicios, han provocado otros malestares por la incorporación de personajes que han actuado en escenarios de injusticia, antidemocracia y represión.

El pasado martes, en la Fundación Elena Poniatowska, Juan Ramón de la Fuente –anunciado como futuro embajador ante la ONU– fue increpado por expresos de la huelga de la UNAM de 1999-2000, pues fue bajo su rectorado cuando se facilitó el ingreso de la Policía Federal Preventiva a Ciudad Universitaria. En realidad, fue una incursión militar que liquidó el conflicto, pues uniformes al margen, eran la Primera y Tercera Brigadas de Policía Militar, las que detuvieron a cientos de jóvenes a los que acusaron, entre otros delitos de terrorismo y peligrosidad social.

De la Fuente dio una conferencia sobre el Movimiento Estudiantil de 1968, justo el día en que se cumplían 50 años del acto en el que otro rector, Javier Barros Sierra, salió en defensa de la autonomía universitaria. El reclamo antes y después del acto, tenía que ver con la operación del 2000.

El EZLN, los movimientos que exigen justicia por lo ocurrido en Iguala en 2014 y los huelguistas de 1999, son izquierdas distintas y no alineadas a los partidos políticos. Pero aun en aquellos sectores de izquierda proclives a la vía electoral, hay inconformidad por la decisión de nombrar a Manuel Bartlett Díaz, como director de la Comisión Federal de Electricidad.

Pesa sobre él la historia: el asesinato de izquierdistas, la presión autoritaria sobre opositores y el fraude electoral de 1988, cuando fungía como secretario de Gobernación.

A un mes de la elección, hay definiciones claras: López Obrador está actuando de conformidad con los cánones del presidencialismo mexicano, institucional con la Presidencia en funciones, resolviendo los añejos conflictos con las cúpulas empresariales que son un poder de hecho y, estableciendo un canal de comunicación con el poderoso país del norte. Para las izquierdas, nada.

Visita www.notassinpauta.com


Con AMLO, nada para las izquierdas - Proceso


Con AMLO, nada para las izquierdas

CIUDAD DE MÉXICO (apro).- Se cumple un mes de la elección y fue suficiente para que las izquierdas, en especial aquellas no alineadas a los partidos políticos, marcaran su distancia, por lo visto definitiva, de Andrés Manuel López Obrador.

La cuestión es simple: López Obrador no es de izquierda, aunque las campañas negras de tres elecciones presidenciales lo hayan expuesto como tal.

No hay engaño. Desde la campaña fue claro: dijo que era tiempo de conciliación y unidad, cuando sus simpatizantes le reclamaban la suma de priistas y panistas; prometió que no daría marcha atrás a la Reforma Energética, aunque planteó revisión de contratos y más inversión gubernamental en el sector; tendió su mano a Enrique Peña Nieto, a Donald Trump y al alto empresariado, a quienes dedicó la espectacularidad de los primeros días después del triunfo.

Al mismo tiempo, se ganó una severa crítica del Ejército Zapatista de Liberación Nacional (EZLN), por los malos oficios del sacerdote Alejandro Solalinde, un exceso de protagonismo que, en caso de contar con enlace como afirmó tenía, acabó descalificado y desmentido por uno de los grupos más emblemáticos de rebeldía contemporánea a escala global.

También te recomendamos

Cuando lo hizo ya había puesto en un primer aprieto a López Obrador al revelar la oferta de presidir la Comisión Nacional de Derechos Humanos, por el hecho de que el organismo es constitucionalmente autónomo, se supone lo elige el Senado y no está en período de renovación sino hasta 2019. Pero en las izquierdas que mantienen vivo el reclamo por la desaparición de los 43 estudiantes de la normal "Raúl Isidro Burgos", la inconformidad vino por la mala imagen del sacerdote, primero en revelar y promover la famosa "verdad histórica" –vulnerable y anómala– que a la postre ofrecería el entonces procurador general, Jesús Murillo Karam.

Solalinde, sin embargo, ha sido avalado por López Obrador cuyo staff confirmó, por ejemplo, la oferta de la CNDH y no desmintió el, por torpe, mal logrado intento de aproximación al EZLN.

Pero no es todo. Los anuncios de nombramientos que ha hecho el ganador de los comicios, han provocado otros malestares por la incorporación de personajes que han actuado en escenarios de injusticia, antidemocracia y represión.

El pasado martes, en la Fundación Elena Poniatowska, Juan Ramón de la Fuente –anunciado como futuro embajador ante la ONU– fue increpado por expresos de la huelga de la UNAM de 1999-2000, pues fue bajo su rectorado cuando se facilitó el ingreso de la Policía Federal Preventiva a Ciudad Universitaria. En realidad, fue una incursión militar que liquidó el conflicto, pues uniformes al margen, eran la Primera y Tercera Brigadas de Policía Militar, las que detuvieron a cientos de jóvenes a los que acusaron, entre otros delitos de terrorismo y peligrosidad social.

De la Fuente dio una conferencia sobre el Movimiento Estudiantil de 1968, justo el día en que se cumplían 50 años del acto en el que otro rector, Javier Barros Sierra, salió en defensa de la autonomía universitaria. El reclamo antes y después del acto, tenía que ver con la operación del 2000.

El EZLN, los movimientos que exigen justicia por lo ocurrido en Iguala en 2014 y los huelguistas de 1999, son izquierdas distintas y no alineadas a los partidos políticos. Pero aun en aquellos sectores de izquierda proclives a la vía electoral, hay inconformidad por la decisión de nombrar a Manuel Bartlett Díaz, como director de la Comisión Federal de Electricidad.

Pesa sobre él la historia: el asesinato de izquierdistas, la presión autoritaria sobre opositores y el fraude electoral de 1988, cuando fungía como secretario de Gobernación.

A un mes de la elección, hay definiciones claras: López Obrador está actuando de conformidad con los cánones del presidencialismo mexicano, institucional con la Presidencia en funciones, resolviendo los añejos conflictos con las cúpulas empresariales que son un poder de hecho y, estableciendo un canal de comunicación con el poderoso país del norte. Para las izquierdas, nada.

Visita www.notassinpauta.com